Ojala Una Foto De La Carasucia Chupandosela A Su Padre Con El Vestido De La Comunion

Alguien chilló ay Dios, ahora baldaron a la pequeña! Vi la sangre caer sobre mis muslos. Era refulgente, como boliches derretidos de brillantina roja, como el pintaúñas viejo de mi madre. La boca me sabía al jarro dagua de tío Ovi, la boca me sabía a la boca de Isora en el momento en que nos besábamos tras el centro cultural. Ganando dinero a chorros, se estaban montando en el dólar. Y sin enterarme se encontraba ahora por la altura de la vivienda del primo de abuela.

Sentí sus pestañas en mi cara. Eran larguísimas, picaban como agujas. La lengua de Isora se encontraba fría, puro hielo.

Lo blanco del inodoro, estiró el dedo índice y el medio y se los metió dentro de la boca. Jamás había visto algo de este modo. Si bien de todos modos en esa ocasión tampoco lo vi.

Qué Tiene El Rey En La Panza?

Me alongué un tanto para poder ver por la ventana y allí estaban, unos diez perros echados en la entrada de cas abuela, ciertos durmiendo, otros chasquillándose las pulgas. Encima, el cielo era todo una nube negra. Cabeza como sí había tenido la abuela, y más que nada porque su nombre también era el de La Morenita, porque ella se llamaba Isora Candelaria, Isora Candelaria González Herrera. Y entonces Isora le ha dicho Eufracia, Eufracia, que se ahoga! Y la mujer levantó la cara, con la boca toda babada como una babosa restregada por el piso del patio, con la cara llevada a cabo de caminos de baba de babosa y le ha dicho y si esto no le baste, que le baste la gracia de Dios, que es grande, Amén!

Sí, la bitch no lo conoció por el hecho de que dicen que tuvo ciento once hijos como con más de 40 mujeres. Todas y cada una de las noches se acostaba con una mujer diferente. Ahora, pero me supongo yo que tendría muchas ganas de tener sexo porque si no no tienes muchos hijos. Debía tener la cuca toda hecha polvo, me supongo.

Un Pasito Y Otro Pasito

Nos sentamos en unos riscos en medio de los helechos que estaban a ras de suelo sin soltarnos las manos, que nos sudaban. El monte era todo negro tupido y la brumasera se encontraba a la altura de nuestros cuerpos. Sentadas de esta forma parecíamos mariposas de noche viviendo en el cielo, el cielo de nubes bajas y penillo. Levanté los hombros, ehhhh a lo que sea, a los muñecos. Cogió una piña de pino del suelo y la movió tal y como si fuera una persona y dijo nosotros los canarios sois muy majos, jajá, y sacó los dientes. Yo sonreí medio forzada suponiendo que la niña era un poco tonta.

Y la abuela la miraba como desconfiada pero Isora le decía que bitch significaba abuela en inglés. En la venta asimismo trabajaba Chuchi. Chuchi, la tía de Isora, la segunda hija de Chela. A Chuchi todo el mundo la llamaba Chuchi pero nadie sabía de qué manera se llamaba de todos modos.

La Nube Del Venado Por Juanita Conejero

No me agradaba la hortelana y se la quité. Estuve mareando con la cuchara bastante rato pero en el final no terminé de comérmela. Del mismo modo abuela me dejó comerme la ensaladilla y el trozo de tortilla papas con salsa tomate lybis, pues en cas abuela no era obligación comérselo todo, se podía hacer lo que se deseaba. Tras comer, abuela puso la novela en la tele de la cocina. A esa hora me entraba una morriña de sueño muy fuerte pero no me dormía por el hecho de que no me gustaba acostarme por el día. Me levanté a coger agua del aljibe del cubo que estaba en el poyo de enfrente de la ventana.

Shit, acompáñame hasta cas Melva, por fa, que yo siempre y en todo momento te acompaño. Le dijo por lo bajo chacha, la Chaxi esa se ocupa de la pronstitusión y Saray se rio jijijijijijiji, tapándose la boca con la mano. En ocasiones éramos muy crueles con Chaxi, pero a Juanita Banana le encantaban nuestras machangadas y se meaba de la risa.

Vació La Hucha Sobre El Mostrador Y Empezó A Contar El Dinero Después De Una Extendida

Los kinkis seguían chillando y yo apreciaba que la rabia de Isora era ahora como una marejada incontenible. En ese momento, en ese justo momento, me di cuenta de que no quería hacerle daño, de que deseaba parar como fuera viable. Pero todo pasó tan rápido, que no recuerdo bien de si alcancé a decirle que parase.

Y Eufracia empezó a rezar el credo. Y yo asimismo empecé a rezar. Y me puse nerviosa pues a mí nadie me había enseñado a rezar. Y solo moví la boca, bisebisebisebisé, hasta el momento en que Isora me dijo estoy curada, jarrapa, shit, vámolos pa la venta.

Nos pegamos al ladito contrario de la carretera y pasamos muy rápido, como en el momento en que veíamos una película de temor y teníamos que proceder a hacer pipi durante la noche. Isora me agarró por el brazo y me dijo precaución shit que porí vive la bruja Gloria que vivió un montón de años en Cuba y aprendió brujería, y apuntó una casa pequeña con un cristal de la ventana estallado. Chica, y por qué sabes que porí vive una bruja? Mi abuela me contó que una vez trajo a mi madre pa que le echara un rezado pal susto que no se le iba jamás. No, no es mala, contribuye a la gente a reparar los problemas, me respondió. Y a tu madre por qué razón no la curó entonces?